En su primer discurso tras el cierre de alianzas, la vicepresidenta argentina, Cristina Fernández de Kirchner, hizo un llamado al diálogo y la unidad en el lanzamiento de Unión por la Patria. Desde Río Gallegos, resaltó la necesidad de superar la economía bimonetaria y abordar el problema del endeudamiento con el FMI a través de acuerdos políticos con la oposición. Además, realizó menciones destacadas a Axel Kicillof y criticó a sectores peronistas que amenazaron con judicializar la discusión partidaria. La convocatoria de Kirchner busca promover un enfoque patriótico y construir consensos en beneficio de la sociedad.
La vicepresidenta argentina, Cristina Fernández de Kirchner, hizo su primera aparición pública después del cierre de alianzas en Río Gallegos, donde habló sobre la importancia del amor por la patria y convocó al diálogo para hacer frente al endeudamiento con el FMI. Durante su discurso, realizó críticas hacia el presidente Alberto Fernández y a sectores del peronismo que amenazaron con judicializar la discusión partidaria. Además, hizo un guiño al gobernador Axel Kicillof, uno de los posibles candidatos presidenciales del espacio.
En su intervención, la vicepresidenta destacó la necesidad de que los argentinos, sin importar su afiliación política, dejen atrás la economía bimonetaria y adopten una postura nacional y patriótica frente a las demandas de ajuste. «Es necesario volver a ejercer el amor por la patria», enfatizó. Asimismo, resaltó que la deuda con el FMI es el principal problema del país y exhortó a construir acuerdos políticos con la oposición para abordar esta situación.
Cristina Fernández de Kirchner también aprovechó la ocasión para criticar al presidente Alberto Fernández y a aquellos sectores del peronismo que amenazaron con judicializar la discusión sobre los votos necesarios para integrar las listas de legisladores nacionales. Además, mencionó a Axel Kicillof, gobernador de la provincia de Buenos Aires, como uno de los posibles candidatos a la presidencia del espacio oficialista. Recordó que fue Kicillof quien advirtió en la Cámara de Diputados sobre las consecuencias de pagar a los fondos buitre, que finalmente llevaron al país a depender nuevamente del FMI.
La vicepresidenta también dirigió críticas a la oposición, haciendo referencia a las palabras de Alicia Kirchner, gobernadora de Santa Cruz, quien previamente había hablado sobre los «politiqueros baratos». Cristina Fernández de Kirchner enfatizó que los verdaderos costos para el país son aquellos políticos que cobran en dólares y han perjudicado a la nación. Sin embargo, aclaró la importancia de la responsabilidad tanto de oficialistas como de opositores y resaltó la necesidad de acordar en beneficio de la sociedad.
En su discurso, la vicepresidenta habló desde el salón Blanco de la casa de Gobierno de Santa Cruz, un lugar que tiene un fuerte valor simbólico debido a los acontecimientos vividos allí durante las gobernaciones de su fallecido esposo, Néstor Kirchner. La preocupación por la deuda y la economía bimonetaria son temas recurrentes en sus discursos y representan sus principales preocupaciones.
Con el lanzamiento de Unión por la Patria, Cristina Fernández de Kirchner busca promover el diálogo y la construcción de acuerdos políticos para abordar el endeudamiento con el FMI, al tiempo que establece críticas hacia el presidente Fernández y realiza un guiño a Axel Kicillof como posible candidato presidencial.