El pasado viernes el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, anunció que no asistirá a la asunción de Alberto Fernández como presidente de la Argentina el próximo 10 de diciembre. Al ser consultado por dicho anuncio, afirmó: «No voy, decidido».
Aunque admitió que no se trata de una represalia, dijo: » Hice fuerza por el otro, pero ya que ganó Fernández hay que seguir adelante. De mi parte no hay ninguna represalia. Espero que ellos sigan haciendo una política con nosotros, una política semejante a la que Macri hizo hasta el momento»
El lunes luego de las elecciones del domingo 27 de octubre, Bolsonaro había dicho que los argentinos habían «elegido mal» y amenazó con romper el Mercosur en caso de que el gobierno de Fernández no siga a Brasil en la flexibilidad del comercio del bloque.
En los últimos días en un mensaje menos confrontativo, el mandatario subrayó: «Miren la situación complicada en la que se encuentra Argentina. Nuestro hermano del sur. Pido a Dios que le vaya bien».