En medio de las negociaciones por la suba de impuestos en la provincia de Buenos Aires, los intendentes diseñaron incrementos de tasas que promedian el 50% para no perder contra la inflación, aunque también afrontan dificultades y polémicas por los montos, sobre todo, en el interior.
En Pinamar, el intendente de Juntos por el Cambio, Martín Yeza, envió un proyecto de ordenanza con aumentos de 57% que fue rechazado en el Concejo Deliberante a fines de diciembre.
Asimismo, su par de Olavarría, Ezequiel Galli (Juntos por el Cambio) también sufrió un revés similar cuando propuso una suba de alrededor del 50%. Ahora, en tanto, el jefe comunal avanzará en el aumento por decreto. Según el diario local El Popular, el incremento rondará el 23%, mientras que insistirá en otro tramo con el cuerpo legislativo más adelante.
Del mismo modo, en *Rauch*, el intendente Maximiliano Suescun tuvo que dar marcha atrás con los incrementos previstos y readecuarlos tras una serie de reclamos: el Municipio preveía un aumento de tasas y contribuciones del 62,5% para el año 2020, además de la creación de una nueva contribución de “repavimentación vial”, pero el proyecto fue rechazado de antemano por la Cámara Comercial local y la Sociedad Rural.
Así, se decidió modificar algunos ítems que habían sido aprobados en la sesión del lunes 23 de diciembre.
Esto mismo se repite en distintos municipios del interior de la Provincia de Bs As
Al respecto el jefe de la mesa política del Partido Federal el Dr Miguel Saredi nos dijo que “los Municipios, y los Intendentes, solo contemplan la inflación, y la suba de costos, pero los vecinos no dan más de la superposición de tributos nacionales, provinciales, y locales. Nuestra Provincia de Bs As, a diferencia de otras, no solo no es subsidiada, como otras Provincias, sino que es notoriamente perjudicada, y eso afecta a nuestros Municipios e Intendentes “